Los restaurantes son lugares donde solemos reunirnos en familia para celebrar cumpleaños, aniversarios, graduaciones, bautizos y otras ocasiones especiales. También son espacios habituales para reuniones de trabajo y negocios. Por ello ocupan un lugar privilegiado en nuestra memoria emocional; allí nos tomamos fotos con nuestros seres queridos.
Muchas veces recordamos un evento o negocio por el lugar donde se celebró. Por esa razón decidí hacer esta reseña de restaurantes que funcionaron en Panamá y hoy han cerrado. Confío en que sus nombres y comentarios traerán gratos recuerdos a los lectores.
La información la obtuve con la valiosa ayuda de la señora Rosina Levy de Sucre, quien me ha colaborado en este y en otros artículos que he escrito.
Casco Viejo
Cuando niño, mis padres me llevaron a una cafetería frente a la iglesia La Merced llamada Rande-Vous.
Cerca del edificio original de la Lotería Nacional, frente a Kardonsky, estaba un pequeño restaurante de Doña Anita Mikalitsanos donde vendían un pollo frito delicioso.
Restaurante Casco Viejo, propiedad de Pascal Finet, a pocos metros de la Embajada de Francia.
En la avenida B, cerca de la bajada de Salsipuedes, había varios chops suey donde se podía comer auténtica comida china.
En el Hotel Internacional, ubicado en la avenida B, Plaza 5 de Mayo, se cenaba en la terraza escuchando a Papito Baker tocar el piano.
En la avenida Central, cerca de la intersección con calle K, estaba el restaurante Hanckok.
Restaurante Mostaza, en la esquina de la avenida A y calle 4ª.
La Exposición, Bella Vista y Marbella
En Calidonia, el restaurante/refresquería Café del Pueblo, también conocido como “La Puñalada”, de la familia Liakópulos, quienes luego establecieron los restaurantes-cafeterías Niko’s Café.
En la avenida Justo Arosemena, entre calles 38 y 39, la refresquería La Inmaculada, famosa por sus helados y batidos; era punto de reunión de adolescentes y jóvenes.
En el área de La Inmaculada operaba el restaurante Las Rejas.
En la avenida Balboa estaba Pana China, probablemente el chop suey más popular de la ciudad en su época.
Restaurante Bolero, al final de calle 43, cerca de avenida Balboa, con un área para escuchar música y bailar.
En calle 43 estaba el restaurante Viejo Pipo.
Café Chorro, ubicado donde hoy se encuentra el edificio del Banco Exterior; contaba con un área al aire libre, centro de reunión de gente joven.
Restaurante Madame Chan, de exquisita decoración y comida china de alto nivel.
Restaurante Rey Kung, reconocido por su excelente comida china.
Restaurante Rizzo, pequeño pero famoso por sus pizzas.
Restaurante Lesseps, en la antigua residencia de la familia Brostella, a la entrada del barrio La Cresta.
En avenida Cuba, cerca del edificio Hatillo, el Chop Suey Mandarín, que frecuentaba cuando tenía mi oficina en esa área, en los años 60 y 70.
Restaurante Acuario, en la avenida Balboa, en un edificio circular de arquitectura singular, cercano a la Contraloría.
Restaurante La Pampa, en avenida Balboa, especializado en carnes argentinas.
Café Balear, en calle Colombia, entre calle 50 y el Parque Urracá, propiedad del chef catalán Pedro Masoliver.
En avenida Balboa estuvo por años el restaurante Marbella.
Cerca de la Plaza 5 de Mayo y del Palacio Legislativo, el Café Pepsi Cola, al aire libre.
Área Bancaria, Marbella, Obarrio y El Cangrejo
En Marbella estaba el elegante restaurante Señorial. Al cerrar, en su local se instaló el Banco de Ultramar y después el Banco Disa.
En vía España estaba la cafetería OK Amigo, con atención para automóviles. Luego se construyó allí el Hotel Continental.
En la calle del Hotel Continental se encontraba el restaurante Sarti, propiedad del empresario italiano Elio Sarti, con excelente comida italiana. Luego Sarti trabajó en el Hotel Nacional en David.
En Obarrio estaba el restaurante Las Américas, de la familia Ciniglio.
El restaurante Cocina Vasca, de Máximo Herrero y el señor Ucar, famoso por sus paellas y mariscos. Posteriormente, Herrero construyó el edificio donde hoy funciona el restaurante 7 Mares.
Patio Andaluz, donde hoy está el edificio Vallarino, cerca del Hotel Marriott. Allí estuvo antes la residencia de mi pariente, el Dr. Octavio (Flaco) Vallarino.
Restaurante Golosinas, que pasó de un local pequeño (hoy Universidad Americana) a un chalet más amplio. Su dueña, mi prima Lourdes Fábrega de Ward, era una excelente anfitriona.
Inter China, en Galerías Obarrio, vía España; además de comida china, ofrecían presentaciones artísticas.
Restaurante Il Tagliateli, elegante restaurante italiano, primer negocio del chef Caponi, quien luego abrió Romanaccio. Estaba donde hoy funciona Rico Pollo.
Restaurante El Galeón de Oro, de Javier Reátegui y su esposa Belly Vallarino, grande y acogedor.
Restaurante Ventanas, en el último piso del edificio del Banco de Boston, vía España. Fue el más elegante de la ciudad.
En El Cangrejo, detrás de la Cabeza de Einstein, estaba El Pez de Oro, especializado en pescados y mariscos.
Restaurante Pomodoro, en la planta baja del apartotel Las Vegas, con un agradable jardín al aire libre. Al lado estaba el Wine Bar.
En calle 50, intersección con calle Uruguay, estaba Mesón de la Paella, especializado en paellas y mariscos. Su dueño, Manolo Bañuelos, era un magnífico anfitrión.
Galaxia, en vía Argentina, esquina con calle Estatua Einstein, era punto de reunión de políticos.
En la calle Eusebio Morales (El Cangrejo) operó el restaurante 1985, exclusivo y elegante, propiedad del chef Willy Diggelmann, quien también tuvo el restaurante Chalet Suizo en el mismo local.

San Francisco
En la esquina de vía España y vía Porras estaba el Club 21, un steak house con bar y música de jazz a cargo de Buddy Satan.
En la misma ubicación operó después el restaurante argentino Bigotes.
En el pueblo de San Francisco se comía el mejor ceviche de la ciudad en un local sencillo frente a la cantina Radio. Frente a este local había un restaurante vinculado al supermercado La Bilbaína.
Antes de construirse Atlapa y el actual Hotel Sheraton, existían dos restaurantes frente a la playa: El Yate de Angelo, propiedad del músico Angelo Jaspe, y Brisas del Mar, famoso por su paella. Cerca estaba el Jardín Restaurante Pete Catalina.
En Coco del Mar, el restaurante Panamar contaba con un área al aire libre junto a la playa, espectacular en noches de luna llena.
En vía Porras, cerca del actual Super 99, estaba el Chop Suey Viña del Mar, muy popular.
En calle 73 San Francisco estaba el restaurante Mar del Sur, uno de los primeros peruanos en Panamá.
En vía Porras estaba el restaurante Jade, que ofrecía comida china y algunos platos griegos.
El restaurante Tambo de Oro servía excelente comida peruana preparada por el chef Ross; cerró en 2021.
En calle 68 San Francisco (calle Peatonal) estaban La Trattoría, del popular Valerio, y Wine Bar San Francisco, de Willy Diggelmann.
Fuera de la ciudad y antigua Zona del Canal
En Las Cumbres estaba el restaurante La Hacienda, ideal para desconectarse del tráfico.
Restaurante Horoko, en la antigua base naval de Rodman, famoso por sus carnes.
Restaurante Perurena, en las afueras de Arraiján, célebre por su pollo frito; parada obligada para los viajeros al interior.
En la antigua Zona del Canal estaba el Club House de Balboa, al que acudíamos de niños con permiso especial.
Club de Oficiales de Fuerte de Amador, muy conocido por sus bufés. En Quarry Heights había otro club, pero menos concurrido.
Club de Yates de Balboa, en una casona que luego habilitó una terraza abierta sobre el mar. Era frecuentado por tripulantes de yates.
Cerca del edificio de la Policía de Ancón estaba el restaurante ELK’s, originalmente una ONG, luego restaurante comercial.
Restaurante Rincón de Filo, en Veracruz, distrito de Arraiján; popular entre jóvenes por sus happy hours.
La Fonda Antioqueña, en vía Cincuentenario, cerca de Chanis; famosa por los chistes y refranes humorísticos escritos en sus paredes. Al lado había una discoteca.
El autor es abogado.