No es un celular, aunque lo parezca. Tampoco es una tablet pequeña. Es el nuevo Galaxy S WiFi de Samsung, una fusión entre media player y tablet que se suma a la familia de productos Galaxy, que funcionan con el sistema operativo Android.
Este dispositivo móvil cuenta con un procesador de 1GHz, pantalla LCD de 5” (hay una versión en 4”), memoria expandible hasta 32GB, bocinas estéreo, cámara, GPS, batería reemplazable, conectividad Bluetooth 3.0 y USB 2.0.
Además de escuchar música, permite navegar en internet (se pueden ver archivos Flash), revisar correos, documentos, ver películas y videos en HD, acceder a redes sociales y a las aplicaciones de Android Market. Con el soporte de VoIP, se pueden hacer llamadas por Skype y compartir videos y chatear con el servicio Qik.
Kenji Hodai, gerente de producto de Samsung, explica que tras el éxito obtenido con sus smartphones, la compañía decidió innovar en su línea de reproductores multimedia para ganar una mayor participación de mercado.
El resultado es este gadget, muy similar al teléfono Galaxy S y diseñado para satisfacer las necesidades de quienes buscan algo más completo que un media player estándar, las aplicaciones de un smartphone o de una tablet, pero que no desean invertir 500 dólares o más en esta, ni “amarrarse” a un contrato adicional al de su teléfono, agrega.
Otras de sus funciones son: AllShare, para compartir contenidos entre productos compatibles; y Second TV. Quienes tienen un Smart TV Samsung (series 7000 y 8000D) pueden descargar una aplicación para usar el Galaxy S WiFi como un segundo televisor y control remoto. Incluso, se pueden ver contenidos de dos fuentes a la vez.