A.P. Møller-Mærsk, el principal grupo industrial de Dinamarca y dueño de una de las mayores navieras mundiales, rebajó el jueves las previsiones de crecimiento del transporte marítimo para este año por el aumento de la incertidumbre geopolítica y económica.
El grupo danés, dueño de Maersk Line -una de las principales empresas mundiales en transporte marítimo de contenedores-, estima ahora para ese mercado una horquilla que va desde una caída del 1 % a una subida del 4 %, cuando a principios de año preveía un crecimiento del 4 % en 2025.
“La previsión para la demanda global de contenedores en lo que queda de año se mantiene muy incierta, debido a la rápida evolución de las políticas comerciales y al aumento de los riesgos de recesión en Estados Unidos”, señala la compañía en su balance presentado hoy.
Si los exportadores chinos redirigen exportaciones perdidas a otros mercados, “podría seguir una respuesta proteccionista, con el riesgo de una guerra comercial más amplia”, escribe.
A.P. Møller-Mærsk espera que haya un crecimiento positivo en el segundo trimestre “si los transportistas capitalizan la pausa de 90 días de aranceles recíprocos haciendo distribuciones anticipadas de sus cargamentos y creando inventarios”.
En el tramo final del año hay un riesgo “creciente” de que se contraiga la demanda, aunque también la posibilidad de un repunte en el comercio si los aranceles son retirados, apunta la compañía.
La firma danesa presentó un beneficio neto de 1,207 millones de dólares (1,064 millones de euros) en el primer trimestre, casi seis veces más que un año atrás, debido a las altas tasas de flete, control de costes en todos los segmentos y mayores volúmenes.