Los ingresos en concepto de peajes del Canal de Panamá disminuirán entre 500 millones y 700 millones de dólares en el año fiscal de 2024 debido a la restricción en los tránsitos de los buques que pueden utilizar la vía, en estos momentos limitados por la sequía.
Así lo informó el administrador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP), Ricaurte Vásquez, quien explicó que se había estimado una reducción de 200 millones de dólares con respecto al año fiscal de 2023, pero debido a la prolongación de las restricciones de tránsito de barcos, por la sequía que ha afectado el nivel de los lagos Gatún y Alajuela, se proyecta ahora una baja mayor de los ingresos.
La ACP intenta compensar la falta de los ingresos por peajes con lo que pagan los buques en concepto de reservas para asegurar su paso por la vía, en tiempos de tránsitos reducidos.
Además, en este 2024 entra en ejecución una segunda fase de ajustes de peajes que daría cierto respiro en lo que respecta a los ingresos del Canal. Pero el administrador de la vía reconoce que estas son medidas de las que no se puede depender.
“No estoy seguro que la pérdida de ese ingreso - de los peajes- se pueda subsanar por otra vía, porque en la medida que los precios de subastas disminuyan y la cantidad de buques en fila sea menor, el ingreso no se recupera”, detalló el administrador de la ACP.
En el año fiscal de 2023, el Canal cerró con menos carga y menos tránsitos comparado con el ejercicio del año anterior, pero precisamente un ajuste en la tarifa determinó que el ingreso por peajes se ubicara en $3,348 millones, es decir, $320 millones por encima de 2022.
El administrador reiteró que el Canal no es transaccional y mantiene relaciones con los clientes a largo plazo. Por lo que “no parece razonable que en una relación comercial de largo plazo se saque provecho”, dijo sobre una consulta si subirían más los costos para compensar la caída de los ingresos.
La falta de agua ha provocado una reducción en la cantidad de barcos que utilizan la vía. De un promedio de entre 36 y 38 barcos ahora se ha programado el paso de 24 buques diarios hasta el mes de abril. De allí que el administrador calcule que esto tendrá un efecto financiero al cierre del año fiscal.
Todo esto es provocado por la sequía, agudizada por el fenómeno de El Niño, por el cual el Canal de Panamá terminó el 2023 con 30% menos de lluvia y sin nuevos reservorios a la vista.
Presupuesto 2024
Para este año los ingresos del Canal en el presupuesto se estimó en 4 mil 776.5 millones de dólares.
Gastos de operaciones por mil 542 millones de dólares.
Aportes directos al Estado de aproximadamente 2 mil 470.8 millones de dólares.
Otros pagos por 247.9 millones de dólares.
El Niño se caracteriza por disminución de las lluvias y el aumento de las temperaturas, provocando calor y evaporación. Este fenómeno estará presente, al menos hasta abril de 2024, influyendo en los patrones que inciden en el aumento de las temperaturas tanto en tierra como en el océano.
El administrador no descartó que pueda reducirse más el número de tránsitos diarios si se agrava la situación del agua y no llueve en los niveles esperados entre abril y mayo de este año.
Las declaraciones de Vásquez se dieron en el auditorio Ascanio Villalaz, de la ACP, donde citó a más de 30 periodistas, entre profesionales locales y corresponsales internacionales, para dar un balance de lo que ha sido el manejo de la crisis del agua en el Canal.
Hay dos puntos focales en esta temática: el impacto actual de la escasez de agua en las operaciones de la vía acuática, y por otro lado, el avance ( o más bien la falta de definición) del proyecto hídrico que deben desarrollar para tener nuevas fuentes de agua dulce.
Vásquez admitió que en este momento el mundo marítimo enfrenta un desafío importante porque una de las vías tiene un problema de seguridad y militar (Suez) y la otra [el Canal) tiene un tema de agua.
“Por eso es vital que el país envíe una señal de que se va a enfrentar y solucionar el tema del agua. El tema no está en la capacidad operativa del Canal sino en una decisión del país”, sostuvo.
Tema de río Indio
La junta directiva de la ACP ya recomendó al Ejecutivo en septiembre del año pasado los pasos que se deben tomar para poner en marcha un nuevo reservorio de agua: Se necesitan reformas legales para ampliar el territorio que es considerado como cuenca del Canal y además, eliminar la restricción de hacer embalses.
El Canal, aunque se inclina por un reservorio en río Indo, ha preferido hablar hasta ahora de varias opciones, pero en cualquiera de los casos necesita que se extiendan los límites de la cuenca hidrográfica para desarrollar un proyecto. Y esto lo debe hacer el gobierno central y la Asamblea Nacional a través de la aprobación de reformas legales.
Pero el Gobierno de Laurentino Cortizo ha evitado dar una postura pública y definitiva del tema. A cambio el ministro de la Presidencia, José Simpson, envió una carta a la junta directiva de la ACP, en la que le solicitó que aclarara si la entidad había realizado consultas públicas entre los ciudadanos que residen en el área de río Indio, para conocer sus opiniones sobre los límites legales de la cuenca hidrográfica del Canal y la posibilidad de construir embalses.
Sin embargo, la junta directiva del Canal de Panamá, presidida por Aristides Royo, aclaró a la Presidencia de la República que, antes de llevar a cabo una consulta ciudadana para desarrollar un proyecto hídrico, le corresponde al Ejecutivo establecer los nuevos límites de la cuenca hidrográfica de la vía interoceánica. Esto permitirá desarrollar, en el futuro, una obra fuera de los límites actuales.
Vásquez recalcó que la entidad no tiene autoridad sobre toda la cuenca. “Y la cuenca hidrográfica no es propiedad del Canal”.
El planteamiento del Canal hacia el Ejecutivo es que se delimite, se defina y se amplíe la cuenta del Canal.
Pero este diario ha conocido de varias cosas que suceden a lo interno del Ejecutivo y que estarían dilatando las decisiones en este tema. Para empezar, aparentemente, el Gobierno de Cortizo estaba detrás de la idea de tener y administrar un reservorio de agua que pondría a disposición del Canal, cosa que no estaría entre los planes de la vía acuática.
Luego, se habrían enamorado de la idea de llevar agua por tubería desde el lago Bayano al lago Gatún, pero esta era otra decisión que estaba fuera del radar de la ACP. Además, en el Bayano está emplazada la central hidroeléctrica actualmente operada por la empresa AES Panamá, a quien se le debería pagar por la toma de agua.
Río Indio, en tanto, implica la construcción de un embalse que afectaría a unas 2,000 personas aproximadamente. Pero el Gobierno estaría evitando darle el sí a un reservorio que encontraría como obstáculo a algunas organizaciones, luego de haber pasado por el reciente repudio del contrato minero, declarado inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia. Entonces, lo grave del asunto es que un tema tan sensible y vital como el agua podría tener tras bambalinas un manejo político en pleno periodo preelectoral.
El 2023 es el segundo año más seco en la historia registrada en la cuenca del Canal, lo que ha redimensionado la necesidad de un proyecto que garantice más agua para el paso de barcos y el consumo de la población.
Vásquez dijo que más tarde o más temprano, “en esta década o en la siguiente, la población panameña va a necesitar más agua”.
El administrador del Canal informó que en caso de que le corresponda al Canal construir un embalse en río Indio, se cuenta con los recursos para hacerlo. “El tema es cuándo se toma esa decisión. Si la responsabilidad fuese del Canal tomaremos una decisión para desarrollar una colaboración con la comunidad. El Canal de Panamá habla con las comunidades de puerta a puerta”, dijo.
Recalcó, sin embargo, que la decisión no está en las manos del Canal sino del Ejecutivo.
“Indio es la mejor alternativa, hay otras alternativas pero no son tan eficientes, pero hay que tomar la decisión”, dijo al reiterar que la decisión debe pasar por el Consejo de Gabinete y luego una ley por la Asamblea Nacional.
Dijo que la posibilidad de utilizar Bayano es que no pertenece al Canal. “¿Cómo se hace esa discusión? La tiene que hacer el Estado porque el Canal no tiene potestad”, respondió Vásquez ante la consulta de La Prensa.
Reiteró que hacer un proyecto de sacar agua de Bayano es mucho más caro que cualquier otra alternativa. “Una tubería de Bayano hasta el lago Alajuela pasa por comunidades y es una ruta más cara que pasar [agua] de río Indio al lago Gatún”.
Dijo que los costos de traer agua de Bayano son aproximadamente 3 veces más altos que traer agua de río Indio.
“Lo más eficiente tiene que ser un embalse nuevo como río Indio, cualquier otra solución saldrá más cara que esta referencia”, sostuvo el administrador.
