El 27 de junio de 2024, la Junta Directiva del Aeropuerto Internacional de Tocumen emitió la resolución 222, mediante la cual rechazaba la propuesta de la empresa Inversiones FJ e Ingeniería PC, que había presentado la oferta más baja: 38.9 millones de dólares.
La resolución dejó sin efecto la adjudicación que, cuatro meses antes, había realizado la misma junta directiva a favor de Inversiones FJ e Ingeniería PC. Luego de una serie de impugnaciones y reclamos presentados por otros participantes, Tocumen decidió cancelar el acto público, alegando que era necesario realizar nuevos estudios.
Ahora, la licitación, que originalmente tenía un precio de referencia de 42.9 millones de dólares, supera los 52 millones de dólares. ¿Qué motivó este incremento en los costos?
Ramón Zambrano, vicepresidente de Ingeniería y Proyectos del Aeropuerto de Tocumen, explicó a La Prensa que la falta de personal técnico idóneo en roles clave, como ingeniero residente, gerente de proyecto, especialista ambiental y especialista en operaciones y topografía, generaba dudas sobre la capacidad de la compañía seleccionada para ejecutar la rehabilitación de las dos pistas de aterrizaje.
Comentó que en la primera licitación solo se solicitaba un gerente de proyecto y un superintendente de proyecto, pero ahora, señaló que las empresas interesadas en el contrato, además de incluir a los profesionales previamente mencionados, también deben contar con un especialista en seguridad operacional, un especialista en seguridad industrial y ocupacional, un ingeniero civil en pavimentos, un ingeniero civil en diseño geométrico de pistas, un ingeniero eléctrico o electromecánico y un topógrafo.

“La ejecución de obras en un aeropuerto internacional no solo demanda un alto grado de especialización, sino también el cumplimiento de estrictos estándares operacionales y de seguridad”, afirmó Zambrano.
Añadió que el proceso de evaluación de las ofertas incluirá un análisis exhaustivo de aspectos técnicos, económicos, administrativos y financieros. Dada la relevancia del aeropuerto de Tocumen como principal hub aéreo de Panamá y de la región, esta licitación —llevada a cabo por la actual administración— exigirá un riguroso proceso de evaluación para asegurar que solo empresas con experiencia comprobada puedan participar.
Capacidad financiera
En la parte financiera, Tocumen también introdujo cambios en los requisitos que deben cumplir las empresas participantes. Inicialmente, se exigía que la razón de solvencia fuera de al menos 0.9 y que la razón de deuda total no superara el 1.0.
Sin embargo, ahora el aeropuerto ha elevado los estándares, solicitando una razón de solvencia mínima de 1.2 y una razón de deuda total máxima de 0.8.
Economistas consultados explicaron que estos indicadores reflejan la salud financiera de una empresa. La razón de solvencia muestra si una empresa tiene suficientes activos para cubrir lo que debe; por ejemplo, si es de 1.2, significa que por cada dólar de deuda, la empresa cuenta con $1.20 en activos, lo que genera confianza en su capacidad para cumplir compromisos.
En cuanto a la razón de deuda total, esta indica qué proporción de los activos ha sido financiada con deuda. Si el valor es 0.8, quiere decir que no más del 80 % de sus activos provienen de deudas, y al menos un 20% es capital propio, lo que refleja mayor estabilidad.
Señalaron además que una razón de solvencia igual a 0.9 significa que la empresa tiene más deudas que activos, lo cual puede interpretarse como una señal de alerta. Por su parte, una razón de deuda igual a 1.0 implica que la totalidad de los activos está financiada con deuda, sin respaldo de capital propio.
Zambrano comentó que el proceso de evaluación se enfocará no solo en el costo del proyecto, sino también en la capacidad técnica de las empresas, su historial en obras similares y su solidez financiera, asegurando que el contrato recaiga en el proponente que obtenga el mayor puntaje bajo esta metodología de ponderación. “Las exigencias mínimas obligatorias incluidas en el pliego de cargos buscan asegurar que los participantes estén a la altura de los requerimientos de la principal puerta de entrada a Panamá”, indicó.
Condición actual
De las dos pistas de aterrizaje, la 03R-21L —construida en 1978— es la que presenta el deterioro más avanzado. Esta pista, ubicada frente a las dos terminales de pasajeros, tiene una extensión de 3,050 metros, de los cuales cerca de 750 metros fueron rehabilitados durante la paralización de operaciones de vuelos comerciales en 2020, debido a la pandemia respiratoria del coronavirus.

La superficie, construida en pavimento rígido (losas de concreto), presenta fisuras y desprendimientos, especialmente en la zona central de rodadura y en las áreas de contacto.
La pista 03L-21R, ubicada en la parte lateral del aeropuerto, en dirección hacia Tocumen, se encuentra en condiciones aceptables, aunque muestra indicios de desgaste ocasionado por el paso frecuente de aeronaves de mayor tamaño, en especial las que cubren rutas hacia Europa.
En el componente técnico, parte de los cambios introducidos están relacionados con el espesor del asfalto que se colocará. El espesor de la recuperación asfáltica en la pista 03L-21R aumentó de 4 cm a 5 cm, lo que mejora su resistencia y durabilidad. Además, se incluyó un nuevo ranurado en esta pista para aumentar la seguridad en condiciones de lluvia, así como trabajos de recuperación de losas de concreto en la zona de transición de Calle Lima.

Otro cambio importante es la actualización del sistema de iluminación de la pista 03R-21L. Mientras que antes se contemplaba la reutilización de luces existentes, ahora se instalarán luces nuevas, lo que garantiza mayor confiabilidad operativa. También se incluyó el ranurado final de esta pista como parte de las mejoras contempladas en el nuevo pliego.
El vicepresidente de Ingeniería y Proyectos del Aeropuerto de Tocumen explicó que también se aplicará pintura especializada para la señalización horizontal. Además, se realizará una campaña geotécnica junto con estudios detallados sobre las condiciones actuales del pavimento y su capacidad de regeneración.
También se contempla el desmontaje y la recuperación de los sistemas de ayudas visuales y radioayudas, así como una nueva canalización fluvial (viaducto) y el reemplazo de los cableados primarios y secundarios del sistema de iluminación paralelo a las pistas.
En septiembre de 2022, una aeronave se salió de una de las pistas de Tocumen al intentar aterrizar en medio de una fuerte tormenta.
Zambrano explicó que la empresa favorecida con la licitación ejecutará los trabajos de construcción y rehabilitación de las pistas en dos fases. La primera consistirá en el recarpeteo de la pista 03L-21R, mientras que la segunda corresponderá a la rehabilitación de la pista 03R-21L.
Con esta metodología, Tocumen busca garantizar que las operaciones y la calidad del servicio a los pasajeros no se vean afectadas, explicó.
El contrato tendrá una duración de cuatro años, ya que, además de los trabajos de rehabilitación, el contratista seleccionado será responsable del mantenimiento de ambas pistas, incluyendo la gestión de los materiales que se utilizarán durante la fase posterior a la entrega de los trabajos, así como del sistema de iluminación.
Entre las tareas específicas se incluyen la inspección periódica de las pistas, el barrido cada 30 días, la remoción de caucho acumulado cada dos años, el repintado de la señalización horizontal y la reparación de juntas y parches.
En el nuevo pliego de condiciones también se aumentó el número de maquinaria que la empresa debe incluir en su propuesta, y se añadieron equipos que no se habían contemplado en el primer acto, como maquinaria para el sellado de fisuras y equipos de demolición.