Los economistas Ernesto Bazán y Carlos Araúz coincidieron en que Panamá enfrenta grandes desafíos económicos para retomar el crecimiento y generar empleo productivo.
En el foro Café con La Prensa, patrocinado por Davivienda, ambos economistas señalaron que el manejo de las finanzas públicas será clave en 2025, un año que promete ser complejo.
Con una deuda pública superior a $52,374 millones y un déficit fiscal estimado en 6 % para 2024, Bazán enfatizó la necesidad de reducir el gasto en al menos $3,000 millones y eliminar exoneraciones fiscales innecesarias, lo que podría generar $1,000 millones adicionales. También sugirió fortalecer la Dirección General de Ingresos para combatir la evasión fiscal.
Araúz, por su parte, destacó la importancia de fortalecer las instituciones y diversificar la economía mediante el impulso a sectores como el nearshoring, tecnología y semiconductores. Además, insistió en una reforma tributaria que incluya el impuesto mínimo global del 15 % a empresas multinacionales.
Ambos economistas concluyeron que Panamá necesita un modelo económico sostenible basado en educación, innovación y confianza en las instituciones.