Luego que la Comisión Europea recomendó este martes 10 de junio sacar a Panamá de la lista de países con riesgo de blanqueo, todavía quedan dos instancias que deben avalar esta exclusión, para que sea una realidad.
El Consejo Europeo y el Parlamento Europeo son quienes deberán aprobar u objetar esta recomendación de sacar a Panamá de la lista con un plazo de un mes, que puede prorrogarse una vez. Si se aprueba, la decisión de la Comisión entrará en vigor 20 días después de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea (UE).
“Solo si el acto delegado no es objetado dentro del plazo establecido, o si se confirma su aprobación, la exclusión de Panamá será efectiva y dejará de formar parte de la lista oficial de alto riesgo para la UE. Hasta entonces, Panamá permanece formalmente en dicha lista”, comentó el consultor económico Luis Ocando.
Panamá fue excluido de la lista de países de alto riesgo por la Comisión Europea tras haber abordado varias preocupaciones clave. Una de las principales preocupaciones expresadas por el Parlamento Europeo en su Resolución del 23 de abril de 2024 se relacionaba con la elusión de las sanciones.
La Comisión Europea señaló que actuar contra la elusión de sanciones es una prioridad fundamental, y que se ha establecido un marco específico para tomar medidas contra quienes facilitan esa elusión y debilitan la eficacia del régimen sancionador de la UE. En este contexto, la Comisión ha mantenido una colaboración activa con jurisdicciones de alto riesgo, se plasma en el documento divulgado por esta instancia sobre su recomendación.
Aunque el GAFI (Grupo de Acción Financiera) retiró a Panamá de su lista en octubre de 2023, la Unión Europea continuó considerando al país como una jurisdicción de alto riesgo por deficiencias estratégicas persistentes, sobre todo en lo referente a la transparencia de la titularidad real. Sin embargo, con base en la información disponible, la Comisión concluyó que Panamá había corregido estas deficiencias. Este avance fue posible gracias a los intercambios técnicos mantenidos desde su inclusión en la lista de la UE en octubre de 2020.
Después de ser retirado de la lista del GAFI, Panamá presentó pruebas a la Comisión que demostraban su cumplimiento tanto con los criterios adicionales establecidos por la UE como con el plan de acción del GAFI. La Comisión evaluó esta documentación y compartió su análisis con el Parlamento Europeo, el Consejo y los Estados miembros a través del Grupo de Expertos en Blanqueo de Capitales y Financiación del Terrorismo.
La propuesta de exclusión se basó en mejoras demostradas por Panamá en la transparencia sobre la titularidad real. Se destaca que, en particular, el país demostró que sus autoridades competentes responden de forma eficaz a las solicitudes de cooperación extranjeras, facilitando el acceso y el intercambio de información básica sobre la titularidad real de personas jurídicas e instrumentos jurídicos.
Por otro lado, Ocando recordó que la entrega formal del acto delegado por parte de la Comisión Europea al Parlamento Europeo no modifica en este momento la situación de Panamá ante las calificadoras de riesgo. Recalca que cualquier posible cambio en la calificación del país dependerá de la decisión final del Parlamento Europeo sobre si aprueba o no la exclusión de Panamá de la lista de países de alto riesgo en materia de blanqueo de capitales.