Las plantaciones de teca ubicadas en Darién y Chepo están aportando el 10% del consumo mundial de esta madera y se proyecta que en los próximos años este volumen se duplique, principalmente hacia mercados como Vietnam, India y China.
Entre 2020 y los primeros cinco meses de 2025, las exportaciones de madera suman 202.3 millones de dólares. Aunque los envíos de tuca (madera sin procesar) siguen dominando las exportaciones del sector, en los últimos años han aumentado los embarques de productos procesados de alta gama para la fabricación de muebles y con fines náuticos.
Bianca Morán, presidenta de la Asociación Panameña de Exportadores y representante legal de Ecotopia Teak, empresa procesadora de teca, comentó que actualmente Panamá cuenta con 40 mil hectáreas de teca con certificación FSC, la cual garantiza que los productos forestales provienen de bosques gestionados de manera responsable, promoviendo prácticas sostenibles y protegiendo los derechos de las comunidades locales y de los trabajadores.
Señala que el consumo mundial de teca es de aproximadamente 70 mil contenedores de 40 pies al año, de los cuales India es el principal comprador con 50 mil contenedores, mientras que Vietnam y China completan los tres primeros puestos.

“Panamá está exportando siete mil contenedores de teca al año, así que ya estamos aportando el 10% del consumo mundial y, con las 40 mil hectáreas que ya están sembradas, podemos duplicar ese aporte de madera con certificación FSC”, comentó Morán, quien agregó que las exportaciones de madera certificada tienen el potencial de igualar el aporte que realiza actualmente el Canal de Panamá a la economía.
Sobre lo que falta para alcanzar un mayor volumen de exportaciones, Morán explicó que la mayoría de las plantaciones certificadas vende en el mercado local, pero aclaró que solo Ecotopia Teak cuenta con una planta certificada para exportar madera con valor agregado.
Lo que necesita el sector, indicó, es la creación de una política de inversiones forestales que permita un financiamiento accesible y apoyo estatal para los productores. Explicó que actualmente el sector forestal está regulado por el Ministerio de Ambiente, que —dijo— no tiene entre sus funciones el fomento a las exportaciones, sino la protección de los bosques, mientras que las plantaciones son privadas.
“Tenemos años pidiendo que el sector forestal esté bajo el paraguas del Ministerio de Desarrollo Agropecuario; hemos enviado cartas solicitando este cambio, pero a la fecha no se ha logrado”, comentó Morán.
Principales mercados
La teca es una madera muy apreciada por su fortaleza y durabilidad, con un color y textura agradables al tacto gracias a sus aceites naturales, que también la protegen contra el agua, las plagas y la descomposición. Su grano suele ser recto, con algunas ondulaciones, y por su estabilidad es poco probable que se agriete o deforme con el tiempo, adquiriendo, al estar a la intemperie, una tonalidad gris plateada que realza su atractivo.
En India, la teca es ampliamente utilizada para la fabricación de puertas, marcos de ventanas, muebles, columnas y vigas en viviendas, gracias a su resistencia a insectos y a su durabilidad, siendo considerada la madera de mobiliario más importante del país. En Vietnam, es muy valorada en la industria del mueble, donde, junto con la acacia y el eucalipto, figura entre las maderas más utilizadas por su calidad, apariencia y larga vida útil.
En lo que va del año, las exportaciones de madera superan los 23.6 millones de dólares y se espera que sobrepasen los 33.8 millones de dólares registrados el año pasado.
Más allá de las exportaciones de madera en tuca o procesada, Morán comentó que la economía circular que puede crearse alrededor de las plantaciones certificadas es importante, pero reiteró que solo será posible con apoyo estatal y financiero.
“Anualmente, Panamá importa desde Estados Unidos y España millones de dólares en virutas de madera que se utilizan en los establos de los animales, cuando en el país existe la materia prima para hacerlo, así como para producir abonos y otros productos, pero se necesita interés de las entidades que brindan apoyo a los pequeños y medianos empresarios”, acotó.
Añadió que actualmente la empresa trabaja con pequeños microempresarios para aprovechar el aserrín que se obtiene al procesar la madera, pero al no contar con apoyo financiero es bajo el volumen que se puede utilizar.

“Nosotros en Ecotopia Teak trabajamos la gran mayoría del año, solo paramos por días festivos y por el Año Nuevo chino, pero el resto de los productores tiene ciclos más cortos de trabajo y eso limita los ingresos, que, combinado con el poco apoyo del sector bancario, restringe el desarrollo de este sector que genera más de 3,500 empleos”, explicó.
Recientemente, la empresa Ecotopia Teak retomó sus envíos al mercado vietnamita, pero ahora con madera procesada. Morán recordó que anteriormente el 80% de sus exportaciones tenía como destino Vietnam y todo era materia prima sin procesar.
No obstante, la empresa ha diversificado su cartera de clientes para no depender de un solo mercado, y realiza envíos de madera certificada a Suecia, Finlandia, Alemania, Dinamarca, Italia y España.
Con relación a Vietnam, Morán comentó que, producto del arancel del 20% que impuso Estados Unidos a las importaciones del país asiático, las empresas están buscando reducir costos logísticos y mantener el menor inventario posible.
“Antes Vietnam compraba solo tucas porque ellos aprovechaban todas las partes de la madera y sus desechos, pero ahora tienen que bajar costos y la madera que necesitan podemos enviarla en un contenedor, cuando antes se requerían cinco”, explicó.

Sobre la exportación de madera procesada a Vietnam por parte de Ecotopia Teak, el ministro de Comercio e Industrias, Julio Moltó, comentó que representa un salto hacia la transformación productiva, al agregar valor desde origen y permitir abrir nuevos espacios para la industria local.
“Seguiremos acompañando estos esfuerzos con herramientas concretas de apoyo, asistencia técnica y promoción comercial”, dijo el funcionario.
Morán destacó que con el apoyo necesario el sector forestal panameño puede incrementar su aporte a la economía, pero advirtió que persisten obstáculos de vieja data, como un suministro confiable de energía en el sector de Panamá Este y Darién.
“Nosotros no podemos competir por precio con otros países como Brasil; Panamá debe destacar por la calidad de sus productos. La madera que utilizamos tiene entre 20 y 25 años de haberse sembrado, lo que garantiza una durabilidad y calidad, mientras que otros países están exportando madera de 11 años que al poco tiempo se deteriora y es vulnerable a los insectos”, concluyó.