Eslovaquia consiguió ayer tres puntos de oro al derrotar como visitante a Rusia con un gol de Miroslav Stoch, que aprovechó un fallo de la defensa rusa para darle la victoria a su selección.
En vísperas del partido, el técnico eslovaco, Vladimir Weiss, el mismo que llevó a su selección a los octavos de final del Mundial de Sudáfrica, había declarado que se conformaba un empate, con lo que le concedió a Rusia la condición de favorita.
Esto quedó de manifiesto en el planteamiento táctico de Eslovaquia, que entregó desde el comienzo la iniciativa a los dueños de casa.
Alentada por su público, Rusia se volcó desde primer minuto sobre la portería de la selección eslovaca, defendida por Jan Mucha, pero sin crear verdadero peligro.
Los dos tiros de esquina que Eslovaquia cedió al inicio del encuentro fueron resueltos sin problemas por sus defensores, que se dieron maña para contener a Pavel Pogrebnyak.