Javier Vargas, ciudadano panameño detenido recientemente en Bogotá, Colombia, enfrenta una solicitud de extradición emitida por las autoridades panameñas debido a múltiples denuncias por presunta estafa a través de la empresa CVT Express.
Según las investigaciones del Ministerio Público, Vargas habría obtenido aproximadamente 1.5 millones de dólares de personas interesadas en adquirir vehículos mediante esta compañía.
Durante la audiencia de legalización de su extradición, celebrada el miércoles 14 de mayo en las oficinas judiciales de Plaza Ágora, cientos de afectados acudieron al lugar para formalizar sus denuncias y exigir la devolución del dinero invertido.
Las diligencias, atendidas por cinco jueces de garantías, permitieron establecer que existen al menos 150 denuncias contra Vargas por un esquema fraudulento de venta de automóviles.
Varias víctimas relataron que realizaron abonos iniciales de hasta 10 mil dólares y luego continuaban con pagos mensuales de 500 dólares, sin que nunca se les entregaran los vehículos ofrecidos a través de redes sociales.
Durante la audiencia también comparecieron dos personas que fungían como vendedores de CVT Express, quienes afirmaron que solo seguían instrucciones y desconocían el trasfondo de las operaciones.
Vargas, capturado el martes en Bogotá, promocionaba vehículos en buen estado, con pocos años de uso y a precios atractivos. Sin embargo, las autoridades panameñas determinaron que los automóviles eran ofrecidos simultáneamente a más de un comprador, lo que constituye un patrón de estafa.
Además de los cargos por fraude, Vargas también es investigado por blanqueo de capitales. Se presume que utilizó a terceros para ocultar los fondos obtenidos de forma ilícita e invirtió parte del dinero en otras actividades económicas, con el fin de encubrir su origen.
El Ministerio Público tiene un plazo de 60 días para formalizar ante las autoridades colombianas la solicitud de extradición de Vargas, quien permanecía en ese país desde hace varios meses, luego de que surgieran los primeros reclamos en Panamá.