ZOOM. Martinelli pretende seguir presidiendo Realizando Metas desde Bogotá. ¿Eso no va en contra de la convención de asilo? ¿Acaso Petro está a la altura de Rosario Murillo? ¿O es que la injerencia en los asuntos políticos de Panamá forma parte del acuerdo para recibir al blanqueador?
REVENTÓN. Por cierto, la última vez que el presidente colombiano, Gustavo Petro, realizó una visita oficial a Panamá, pasó como una veleta por el Palacio de las Garzas: llegó el viernes 28 de marzo al mediodía, sostuvo una reunión con el presidente Mulino que duró una hora, luego ofrecieron una conferencia de prensa conjunta que no superó los 12 minutos, disfrutó de un almuerzo en el Salón Los Tamarinos… y cambio y fuera. El fin de semana lo pasó en Isla Colón, Bocas del Toro, con los Robinson. También se dejaron ver por allá el embajador de Panamá en Colombia, Mario Boyd, y Fernando Correa. Estos dos últimos personajes reaparecieron un mes después con Martinelli en Bogotá. Queda la duda si Petro fue a Bocas a vender un favor o a cobrar uno por adelantado.
OPOSICIÓN. La coyuntura actual está evidenciando una profunda división entre Ricardo Lombana y los diputados de Moca, al menos en lo que respecta a la CSS. Mientras la bancada apoyó las reformas presentadas por el Ejecutivo, Lombana se ha dedicado a fustigar a la actual administración de la Caja y sostiene que, si hubiese estado en una curul, no habría votado a favor de esa propuesta. Si Lombana tenía algo que decir respecto a la ley de reformas, debió sentarse hace varios meses con Ernesto Cedeño, Grace Hernández y Pérez Barboni. Para algo tiene bancada.
NI CASO. El pleno legislativo se ha reunido ya en tres ocasiones (lunes, martes y miércoles) desde que el Ejecutivo convocó a sesiones ordinarias, pero no ha habido votaciones porque la mayoría de los diputados ha estado ausente. La jornada de ayer duró menos de seis minutos debido al ausentismo, pese a que había 23 designaciones listas para ser ratificadas. ¿Será que algunos diputados están en paro y no le han avisado a nadie?
CASH. Si supuestamente Kevin Moncada, abogado y compinche de Zulay Rodríguez, no tiene cuentas en el sistema bancario, ¿cómo cobra el salario de $3,000 mensuales que recibe como funcionario de la oficina de Raúl Pineda en la Asamblea? Se salva que ahora la Contraloría está pagando con cheque.