Aludiendo a la diplomacia discreta, y marcando diferencias en los “decibeles” frente a los funcionarios del gobierno de Estados Unidos de América (EUA), el ministro de Relaciones Exteriores, Javier Martínez-Acha, compareció ante la Asamblea Nacional, este 29 de abril, para responder a cuestionamientos sobre el servicio exterior y la política internacional que ha sostenido el país en medio de tensiones por la soberanía nacional y la administración del Canal de Panamá.
Uno de los constantes ejes de su intervención fue el llamado a la discreción. “No puedo decir todo lo que quisiera porque esto es una carrera de resistencia y no de velocidad. Muchas veces me he tenido que morder la lengua, pero siempre, bajo el liderazgo del presidente José Raúl Mulino, se tiene presente la soberanía nacional, el respeto a nuestro territorio y que el Canal es y seguirá siendo panameño”, señaló Martínez-Acha al responder una pregunta sobre la relación con EUA.
Aunque había sido citado desde el 22 de enero, el canciller acudió a la Comisión tres meses después. Alegó que un viaje a Londres y otros compromisos le impidieron comparecer antes ante el Legislativo.
Había 16 preguntas formuladas desde entonces, muchas de ellas desfasadas por las recientes actualizaciones en la relación con Estados Unidos, como la firma del nuevo Memorándum de Entendimiento en materia de seguridad, que fue el eje central de varias de las intervenciones.

“El Memorándum de Entendimiento es un instrumento a nivel interinstitucional, incluso entre dos o más instituciones, pero no entre ambos Estados”, argumentó Martínez-Acha, como una de las razones por las cuales el documento no fue remitido a la Asamblea Nacional.
Además, dijo que el documento no se enmarca dentro de la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados y que no es vinculante. “El documento no tiene partes, sino participantes; establece entendimientos, no obligaciones”, al tiempo que dijo que no contempla cláusulas.
Varios diputados refutaron esta postura. Augusto Tuto Palacios sostuvo que el documento contiene, en algunos puntos, redacciones similares a cláusulas de cumplimiento. Por su parte, la diputada Walkiria Chandler, citó el capítulo decimosexto de la Carta de las Naciones Unidas, para rebatir la afirmación del canciller de que el memorándum no está sujeto al derecho internacional, otra de las razones expuestas para justificar su exclusión del escrutinio legislativo.
También se abordó el punto 7 del acuerdo, que establece que para acceder a las bases panameñas donde habrá presencia militar estadounidense, se debe notificar previamente el ingreso. Sobre esto, Martínez-Acha apuntó: “No es ceder soberanía bajo ninguna circunstancia”, pero reconoció que tendrían que notificar su acceso.
La sombra sobre la soberanía
Las intenciones de Estados Unidos sobre el Canal de Panamá también fueron abordadas. Diputados exigieron explicaciones sobre las acciones emprendidas para salvaguardar la soberanía y si ha habido algún tipo de coacción por parte del gobierno estadounidense.
“A este canciller y al presidente de la República nadie los coacciona. Que no levantemos la voz no significa otra cosa que hacer una diplomacia valiente (...) el último panameño que se atrevió a desafiar a Estados Unidos con un machete, no le fue muy bien”, expresó el ministro, aludiendo a las exigencias de posturas más enérgicas frente a Washington.
El canciller insistió en que se está manejando una estrategia diplomática discreta y que no puede divulgarse en su totalidad. No obstante, reveló que ha instruido a las misiones diplomáticas panameñas a promover una campaña que logre sumar hasta 15 nuevos adherentes al Protocolo del Tratado de Neutralidad, que reposa en la Organización de Estados Americanos (OEA).
Ante preguntas específicas sobre esta estrategia, la diputada Chandler apeló a la Ley 6 de 2002 sobre transparencia y acceso a la información, y señaló que la Asamblea no ha recibido notificación alguna sobre la confidencialidad de temas de política exterior, como afirmó el canciller. Martínez-Acha respondió con una analogía, comparando la publicación de una estrategia diplomática con la revelación del plan político de un diputado para ser electo.
Cuando fue el turno de la diputada Janine Prado para hacer cuestionamientos, resaltó un breve intercambio de señalamientos que inició Martínez-Acha. El canciller aseguró que Prado se acercó al ministerio para realizar un viaje conjunto al extranjero. Los únicos detalles que dio el ministro sobre el supuesto viaje, tienen que ver con la ascendencia española de ambos. A ello, la diputada respondió que no lo había aceptado y que “no se arrepentía de haberlo rechazado”.
El canciller también reprochó un viaje al presidente de la Comisión, Joan ‘Jhonny’ Guevara, señalando que este participó en un viaje con la Cancillería. El diputado se defendió indicando que “pagó todo con su dinero”.
Fueron varias las ocasiones en que el canciller acudió a reproches en medio de las preguntas. Otras dos ocasiones tuvieron que ver con el rechazo de la cortesía de sala a sus viceministros y a funcionarios de cancillería.
El comunicado conjunto con EUA
Otro tema abordado fue la declaración conjunta emitida tras la visita del secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth. En el texto llamó la atención la omisión, en la versión en inglés, del reconocimiento explícito de la soberanía de Panamá sobre el Canal, así como el señalamiento de la presencia china en la vía interoceánica como ‘problemática’.
Ante esta omisión, Martínez-Acha se limitó a informar que presentaron una queja formal ante la embajada estadounidense mediante una carta, pero que, a 20 días de emitido el comunicado, no han recibido respuesta.
Por otro lado, el canciller reconoció que la influencia china podría representar algún riesgo en materia de seguridad, aunque fue enfático en afirmar que “no se va a romper relaciones con China”. Señaló, sin embargo, que se han tomado medidas, como no continuar en el acuerdo de la Ruta de la Seda.
“Entendemos que tenemos que tener una relación equilibrada. Tenemos que entender: nuestro principal socio comercial y en materia de seguridad es Estados Unidos”, manifestó.
El decibel de Trump
Martínez-Acha dejó claro que no buscará competir con el tono confrontativo de Donald Trump. “No competiré con los decibeles del jefe del Ejecutivo de Estados Unidos”, dijo, refiriéndose a las recientes declaraciones del expresidente, quien el pasado sábado 26 de abril insistió en exigir tránsito gratuito por el Canal de Panamá y el Canal de Suez, en Egipto.
En ese sentido, el ministro anunció que se busca un acercamiento con el Canal de Suez a través de la embajada panameña en Egipto.
Este 29 de abril, el embajador de Estados Unidos ante Panamá, Kevin Marino Cabrera, presentó sus credenciales al canciller. Sobre ese breve encuentro, Martínez-Acha indicó que no se discutieron las declaraciones de Trump.
Al respecto de la relación con Estados Unidos, el canciller señaló en la Comisión que “no describiría la relación con Estados Unidos como tensa. Es compleja”.
Lo que no quedó claro es si esa complejidad continuará en ascenso, en medio del despliegue de lo que Martínez-Acha insiste en llamar diplomacia discreta. Por ahora, además, deberá enfrentar una resolución de voto de censura que pesa en su contra en la Asamblea Nacional, a la que se refirió como un “asunto interno del Legislativo”.