Ifarhu: $10.7 millones en auxilios económicos este año

Ifarhu: $10.7 millones en auxilios económicos este año
Las personas protestaron este año para exigir información sobre la entrega de los llamados "auxilios económicos". EFE


A pesar del escándalo y la creciente indignación ciudadana, el Gobierno continúa desembolsando millones de dólares de manera discrecional en el polémico programa de auxilios económicos del Instituto para la Formación y el Aprovechamiento de Recursos Humanos (Ifarhu).

Este año, las críticas no han frenado la asignación de fondos que muchos consideran opacos y mal administrados, alimentando las sospechas de posible tráfico de influencias y la falta de transparencia en el manejo de los recursos públicos.

Recientemente, La Prensa reveló una base de datos que ilumina una porción significativa del programa de auxilios económicos, enumerando a 2,144 beneficiarios entre el 7 de julio de 2019 y el 24 de mayo de 2023. Este registro detalla un gasto total de $141.6 millones en auxilios económicos durante ese período. Sin embargo, estas cifras solo representan una parte del panorama completo, ya que aún se desconocen los beneficiarios de otros 2,759 desembolsos.

Ciertamente, el monto es mayor, ya que información estadística suministrada por el Ifarhu a la Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (Antai) da cuenta de que entre enero y abril de este año se han pagado $10.7 millones en concepto de 636 auxilios económicos.

Resulta notable el peso que estos $10.7 millones destinados a auxilios económicos representan dentro del total de $45 millones desembolsados por el Ifarhu durante el período de enero a abril de este año en sus cuatro programas principales: becas, asistencia económica educativa, auxilio económico y otros fondos. Lo anterior supone que el 24% de los recursos asignados por esa entidad en programas de financiamiento educativo se destinaron a auxilios económicos.

Los programas

Por ejemplo, en el programa de becas, un total de 49,507 estudiantes distinguidos, ganadores de concursos generales, así como aquellos destacados en áreas culturales y deportivas, recibieron un monto de $25.8 millones. Por otro lado, en el plan de asistencia económica, 4,976 estudiantes fueron destinatarios de una suma total de $5.9 millones. Además, en un renglón denominado “otros fondos”, fue asignado a 132 individuos la suma de $2.6 millones.

Y si bien se dio a conocer el monto total de los desembolsos este año, aún falta la divulgación de los nombres de los beneficiarios. Esta opacidad persistente ha generado críticas, particularmente después de que el exdirector de la entidad, Bernardo Nando Meneses, se negara a entregar los expedientes de los beneficiarios a la Antai. Meneses justificó su decisión invocando la Ley 81 de 2019, que protege los datos personales, argumentando que la divulgación de esta información infringiría la privacidad de los individuos.

Llama la atención la diferencia abismal que existe en los montos de aquellos beneficiarios del Ifarhu que recibieron un auxilio económico, y los estudiantes distinguidos o que ganaron una beca a través del concurso general. En el primer caso, se desembolsaron $10.7 millones a solo 636 personas y en el segundo, $25.8 millones entre 49,507.

Opacidad

Este año, el contralor de la República, Gerardo Solís, reconoció que unilateralmente tomó la decisión de ocultar el nombre del 56% de los beneficiarios de los auxilios económicos que entregó el Ifarhu entre julio de 2019 y mayo de 2023.

Pese a la aseveración de Solís, la Antai ha advertido, en varias ocasiones, que se debe brindar toda la información sobre el funcionamiento y los beneficiarios de los programas del Ifarhu, dado que estos se alimentan de fondos del Estado y, por tanto, su información es de carácter público.

Ni la Contraloría ni el Ifarhu han hecho caso y se niegan a transparentar esa información.

En el reglamento de becas, asistencias económicas educativas y auxilios económicos del Ifarhu, que consta de 71 artículos, están listados los requisitos, derechos y obligaciones de los estudiantes acreedores de los programas de becas y de asistencias. En ambos se resalta que se dará preferencia a aquellos estudiantes “económicamente más necesitados”, de áreas vulnerables o en situación de riesgo social.

Sin embargo, muchos auxilios económicos fueron asignados a funcionarios y familiares de ministros, diputados, diplomáticos, proveedores del Estado, miembros del Partido Revolucionario Democrático (PRD) y hasta del presidente Laurentino Cortizo. También a personas sin aparentes necesidades económicas.



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