‘No existe ningún objetivo bélico o de combate dentro de las especificaciones que Panamá ha requerido en la compra de estas aeronaves“, dijo el viceministro de Seguridad, Luis Felipe Icaza, sobre la compra de las seis aeronaves que está tramitando el Gobierno para el Servicio Nacional Aeronaval (Senan).
El martes 11 de marzo el Consejo de Gabinete aprobó la adquisición de cuatro aeronaves A-29 Super Tucano por $78 millones a la empresa de Brasil Embraer S. A. y dos aeronaves CASA C-295 por un monto de $109 millones a la empresa europea Airbus.
El viceministro expresó que las aeronaves solo tienen capacidad de patrullaje, rescate y carga y servirán para las labores de rescate y atención humanitaria del Senan además de dar respuesta a casos de emergencia en las que se requiera usar transporte aéreo.

Sostuvo que las nuevas aeronaves van a reemplazar la flota actual integrada por 14 aviones que datan de la década de 1980 y cuyo mantenimiento representa alrededor de 10 millones de dólares anuales.
“Responde a la necesidad de contar con medios adecuados para enfrentar situaciones ilícitas en el territorio nacional como la lucha contra el narcotráfico, la pesca ilegal y otras operaciones irregulares”, expresó.
Detalló que las aeronaves serán adquiridas con financiamiento externo o préstamo por un período de 10 a 12 años. “Estamos viendo cuánto van a costar y en el tiempo que nos va a dar el banco. Los recursos saldrán de nuestro presupuesto”, dijo el viceministro.
Informó además, que los aviones CASA que comprarán a Airbus serán usados para labores de carga y humanitarias, operaciones de reconocimiento, búsqueda, salvamento y la extinción de fuego, mientras que las aeronaves Súper Tucano serán para el patrullaje aéreo.
Luis Felipe Icaza, viceministro de Seguridad se refiere a la compra de aviones de batalla autorizado por el Gabinete.https://t.co/rLx5Yn2AoO pic.twitter.com/81APb6nriO
— La Prensa Panamá (@prensacom) March 12, 2025
El viceministro expresó que aunque todos estos aviones se pueden dotar de armamentos, aclaró que serán usados prioritariamente para el patrullaje y la prevención del crimen organizado.

Rafael Jurado, vicecomandante naval del Senan, reiteró que no serán aeronaves de combate. “No estamos hablando de algo bélico, sino de algo que estará usando Panamá para vigilar su seguridad”.

Jurado precisó que se potenciará la capacidad del Estado para vigilar en todo el territorio nacional.