El diputado presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Herrera, decretó el cierre del periodo de sesiones ordinarias este jueves 30 de octubre, antes de las 3:00 p. m. En ese momento, la Comisión de Credenciales, Reglamento, Ética Parlamentaria y Asuntos Judiciales -que estaba reunida simultáneamente en otro salón- suspendió la discusión en primer debate de las reformas al Reglamento Orgánico del Régimen Interno (RORI).
Ahora, el proyecto (que aglutina 16 propuestas presentadas por diputados de distintas bancadas) tendrá que esperar, en principio, hasta el 1 de enero de 2026, a menos haya una convocatoria a sesiones extraordinarias por parte del Ejecutivo.
Tan solo ayer, miércoles, los diputados de los partidos Realizando Metas (RM), Revolucionario Democrático (PRD) y Panameñista que son miembros de la comisión, impusieron su mayoría para rechazar reformas propuestas por la coalición Vamos.
La metodología de discusión previamente adoptada por la comisión —que dividió las reformas en seis bloques de varios grupos cada uno—, permitía que los diputados comisionados presentaran más modificaciones sobre la marcha, algo que estaba ocurriendo este jueves hasta que la sesión se suspendió.
Aunque algunos artículos fueron consensuados entre Vamos y los partidos políticos, ya se anticipaba que el periodo de sesiones ordinarias terminaría sin la aprobación, en primer debate, del proyecto para reformar el RORI.
Era la crónica de una muerte plenaria anunciada.
En la mañana del jueves, ya los ánimos se habían caldeado en el pleno legislativo entre la diputada presidenta de la Comisión de Credenciales, Dana Castañeda, y el diputado Luis Lucho Duke, de Vamos.
Castañeda pidió la palabra en el pleno para contestar a aquellos que hablaban de falta de voluntad para modificar el reglamento y lamentaban que se hubiese dilatado la discusión en las primeras semanas de la legislatura.
“Eso no servía, tenía cosas inconstitucionales ahí, Lucho“, replicó Castañeda al diputado Duke en el pleno, refiriéndose al informe que una subcomisión preparó, sobre un paquete de reformas propuesto en el periodo legislativo de julio de 2024 a julio de 2025. Vamos lamentó que ese informe fue descartado, pese a todo el tiempo y esfuerzo que en su momento dedicó aquella subcomisión. Tampoco se tomó en cuenta otro informe elaborado por Duke.
“Lo que pasa es que ustedes quieren mandar aquí”, le dijo Castañeda durante la intervención, mientras otros diputados de Vamos reclamaban.
Castañeda también se refirió a las modificaciones discutidas en curso dentro de Credenciales, particularmente una que pedía al presidente de la República seguir un estilo predefinido en los discursos del 1 de julio, que ella catalogó como ‘intromisión en otro poder del Estado’.
Lo que se quedaría fuera
Algunas propuestas que se quedaron fuera de la discusión de este jueves 30 de octubre incluyen descuento salarial a aquellos diputados que se ausenten del pleno y no habiliten al suplente.
Asimismo, una propuesta que obligaba a pruebas antidoping no obtuvo suficientes votos para avanzar, entre varias otras.
Finalmente, las modificaciones al RORI quedaron en una suerte de limbo entre la votación por bloques —que no pasó de 41 artículos, de un total de 247— y el cierre del primer debate.
En otras palabras, ni se terminó la votación por bloques ni se votó un consolidado de proyectos de modificación en primer debate.

Promesas en entredicho
Antes de que la sesión “se cayera”, varios diputados de Vamos ya percibían que la confianza depositada en sus aliados del Panameñista, particularmente, en Jorge Herrera, había quedado en entredicho cuando varios proyectos quedaron en el aire, a pesar de que pudieron ser avanzados, según argumentaron.
La diputada Janine Prado, de Vamos, fue categórica.
“La falta de voluntad para cambiar las cosas sigue siendo el peor enemigo de la Asamblea”, dijo.
Mencionó el caso de la Comisión de Gobierno, donde los proyectos anticorrupción no prosperaron, y de la Comisión de Credenciales, que, dijo, “sigue negando lo más básico para recuperar la confianza de la ciudadanía”.
Agregó que la presidencia de la Asamblea, que ostenta el panameñista Herrera, “se olvidó por completo” de su discurso del 1 de julio de 2025, día en que tomó posesión.
“Esta Asamblea parece más una extensión del Ejecutivo”, sentenció tajante.
La Asamblea entró en un periodo de receso hasta el próximo 1 de enero de 2026. Solo podrá sesionar si se convocan sesiones extraordinarias, una potestad del Ejecutivo.

