El fenómeno de La Niña, que se experimentó durante el primer trimestre y parte de este mes de abril, ha llegado a su fin por esta temporada, según declaró la NOAA,la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos.
Este mismo organismo había emitido una alerta el pasado 9 de enero, debido a que se observó un enfriamiento constante en la superficie del mar en la región del Niño 3.4 en diciembre de 2024, con altas probabilidades de que dicho enfriamiento se extendiera durante el primer cuatrimestre de 2025.
Con un nuevo pronóstico y análisis, la NOAA ahora percibe un debilitamiento de las temperaturas superficiales del mar (TSM) por debajo del promedio en el Océano Pacífico ecuatorial central y centro-oriental en marzo de 2025, y señala que regresaron las condiciones de un patrón climático ENOS neutral (la fase intermedia entre La Niña y El Niño).
“A solo cuatro meses desde que emergió, el 10 de abril de 2025 se declaró el fin del fenómeno de La Niña. En consecuencia, al no alcanzar la duración mínima esperada de un fenómeno de La Niña, este evento de variabilidad climática se registra en la serie histórica como una fase fría del ENOS (El Niño-Oscilación del Sur), pero no se categoriza como La Niña”, indicó un comunicado emitido por el Instituto de Meteorología e Hidrología de Panamá (Imhpa), que hace referencia a dicho fenómeno y a la condición climática reportada por la NOAA.
El comunicado indica que, debido al enfriamiento y desvanecimiento antes de lo pronosticado, las condiciones climáticas experimentadas en los primeros meses del año fueron descritas como “un evento breve y relativamente débil, pero que contribuyó a moderar en algo las temperaturas globales”.
Además, se advierte que las temperaturas registradas, de cualquier manera, se encuentran en valores récord debido al empuje del calentamiento global.
El Instituto de Meteorología e Hidrología de Panamá destaca que el evento coincidió con la temporada seca del país y generó una mayor frecuencia de días nublados, lluvias aisladas y el prolongamiento de la temporada lluviosa, lo cual se evidenció en que las lluvias se extendieran hasta finales de enero de 2025.
“El ENOS, hoy día, se encuentra en su fase neutral, es decir, que no existe una influencia de este fenómeno sobre los patrones del clima, y existen probabilidades superiores al 70 % de que las condiciones de la fase neutral del ENOS predominen durante lo que resta del primer semestre de 2025”, expresa el comunicado del Imhpa.