El paro indefinido de los docentes, que mañana, 23 de junio, cumple dos meses, ha dejado a miles de estudiantes sin clases en el sector oficial de educación. La situación ha llegado a un punto crítico, por lo que es necesario tomar decisiones urgentes respecto al futuro de los estudiantes.
En ese sentido, la ministra de Educación, Lucy Molinar, lanzó una fuerte advertencia a los educadores que continúan en paro: aquellos que no se presenten este lunes, cuando comienza el segundo trimestre, serán reemplazados.
“No es lo que se quiere, pero el docente que no llegue el lunes tendrá que asumir las consecuencias de sus actos”, manifestó la titular de Educación en declaraciones realizadas ayer, sábado, en la final de los Juegos Intercolegiales 2025.
Molinar dejó en claro que el derecho a la educación de los estudiantes debe prevalecer por encima de cualquier diferencia política. “Hemos sido muy tolerantes. Ahora nos toca defender el derecho de los estudiantes”, agregó con firmeza.
El paro, que ha afectado a varias regiones del país, ya ha provocado la pérdida completa de un trimestre escolar, una situación que ha encendido las alarmas entre los padres de familia y las autoridades educativas.
Aunque algunos docentes han retornado a sus puestos, un número significativo sigue en huelga, dejando a cientos de niños y jóvenes sin educación.
Molinar también recordó que aquellos docentes que retornen a sus funciones serán bien recibidos, pero advirtió que quienes persistan en la huelga y se involucren en actividades políticas deberán asumir las consecuencias de su decisión.
En un gesto más contundente, la ministra de Educación reiteró que quienes no cumplan con sus responsabilidades no recibirán salario, apelando al principio de responsabilidad laboral: “El que no cumplió con su deber, no cobra”, sentenció.
Sobre la situación en Bocas del Toro, Molinar manifestó que “algunos grupos lo que están buscando es desestabilizar al país. Eso no es lucha política, eso es terrorismo contra el país”, reafirmando su postura firme en defensa de la educación y el bienestar de los estudiantes panameños.
Molinar enfatizó que el gobierno no cederá ante lo que considera una agenda política que ha paralizado el sistema educativo, comprometiéndose a garantizar la continuidad de las clases a toda costa.