Una de las personas que resultó gravemente herida tras la explosión registrada en un apartamento de la Torre 1 del PH Alsacia Towers, en El Bosque, en la vía Ricardo J. Alfaro, falleció este domingo 19 de octubre de 2025.
Se trata de Ámbar Guelfi de Obaldía, quien se encontraba recluida en estado crítico en el Complejo Hospitalario Dr. Arnulfo Arias Madrid de la Caja de Seguro Social, tras sufrir quemaduras en su cuerpo.
La explosión ocurrió en horas de la madrugada del pasado jueves 16 de octubre, dejando un saldo inicial de tres personas heridas.

Guelfi de Obaldía, con un 80% de quemadura en su cuerpo, fue una de las tres personas afectadas que dejó la explosión de aquel día, entre estas su madre de 62 años, con alrededor del 40% de su cuerpo afectado; y el niño Ian, hijo de Ámbar, quien también sufrió lesiones y está hospitalizado en el Hospital del Niño Dr. José Renán Esquivel.
La doctora Marvis Corro, jefa del Servicio de Quemados del Hospital del Niño, informó que el niño de 9 años afectado por la explosión en el PH Alsacia Towers presenta quemaduras de segundo y tercer grado en el 25.45% de su cuerpo.

Actualmente, el menor se encuentra hemodinámicamente estable, lo que significa que su circulación sanguínea, presión arterial y frecuencia cardíaca están controladas y dentro de lo normal. Esto indica que su organismo está respondiendo bien al tratamiento inicial.
El niño ya está siendo alimentado a través de una sonda nasodenal, un tubo delgado que se introduce por la nariz y llega hasta el intestino delgado, permitiéndole recibir los nutrientes necesarios cuando no puede alimentarse adecuadamente por la boca.
Debido a la gravedad de sus lesiones, requerirá múltiples cirugías, incluyendo procedimientos de limpieza y desbridamiento (retiro de tejido dañado), así como cierre de heridas mediante autoinjertos, es decir, injertos de su propia piel.
Además del tratamiento médico, el paciente y su familia están recibiendo apoyo psicológico, como parte integral del proceso de recuperación.
Este trágico incidente ha dejado una profunda huella en una familia, que hoy enfrenta la pérdida de una madre y la lucha por la recuperación de un niño y su abuela gravemente heridos. Mientras continúan las investigaciones para esclarecer las causas de la explosión, la atención médica y el apoyo emocional siguen siendo claves en el proceso de sanación.


