La región de Azuero enfrenta una de sus crisis más graves en cuanto a agua potable. Desde hace dos semanas, más de 100,000 personas de las provincias de Herrera y Los Santos se han visto afectadas por la contaminación del río La Villa, lo que ha obligado a las autoridades a declarar un estado de emergencia sanitaria.
Las plantas potabilizadoras de ambas provincias han reanudado operaciones, pero con una advertencia crucial: el agua que producen no es apta para el consumo humano.
A pesar de la grave situación, el ministro Fernando Boyd Galindo, quien forma parte de la comisión especial designada por el presidente José Raúl Mulino para gestionar esta crisis, explicó que la decisión de poner en marcha las plantas potabilizadoras tiene como objetivo aliviar la grave escasez de agua para las necesidades básicas diarias de los ciudadanos.
“De no haber reactivado las plantas, podríamos estar enfrentando una epidemia”, advirtió Boyd Galindo, quien aclaró que, aunque el agua no es potable, se puede utilizar para el aseo personal y la limpieza del hogar.
El Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan) ha emitido un comunicado en el que indica que el agua distribuida no debe ser consumida, ni utilizada para cocinar o lavar utensilios.
En su lugar, las autoridades han intensificado la distribución de agua embotellada y la de camiones cisterna para garantizar el abastecimiento seguro a la población.
El Ministerio de Salud (Minsa) aclaró que, a pesar de la contaminación, el agua que sale de los grifos en la región de Azuero es segura para bañarse. Sin embargo, para evitar cualquier riesgo, recomienda que el agua destinada para consumo humano sea hervida entre 3 y 5 minutos antes de beberla.

Esta medida preventiva se basa en que los niveles de cloro en el agua se mantienen dentro de los parámetros normales, aunque la cautela sigue siendo fundamental para proteger la salud de la población.
Por otro lado, el director del Idaan, Rutilio Villareal, aseguró que el monitoreo del río La Villa y de las plantas potabilizadoras continúa, con el fin de evaluar los parámetros físicos, químicos y biológicos del agua tratada.
“Una vez verifiquemos que el río cumple con las condiciones para producir agua potable, se procederá a la desinfección de la planta y de los más de 320 kilómetros de red que abastecen tanto a Herrera como a Los Santos”, explicó Villarreal.
El origen de esta crisis radica en la contaminación del río La Villa, lo que ha dejado a las comunidades de ambos corregimientos sin acceso a agua potable segura. La situación ha alcanzado niveles tan alarmantes que incluso se ha suspendido la actividad escolar en varios distritos debido al riesgo sanitario.
Las autoridades recalcaron que solo debe consumirse agua embotellada o distribuida en camiones cisterna, y continúan trabajando con la esperanza de solucionar este grave problema ambiental que afecta la salud de los residentes de Azuero.
Áreas afectadas en Los Santos:
La Villa
El Sesteadero
La Laja
Llano Largo
Los Olivos
Santa Ana
La Espigadilla
Guararé cabecera
Santo Domingo
El Cocal
El Carate
Las Palmitas
El Ejido
Las Tablas cabecera
Macaracas cabecera
Llano de Piedra
Por su parte, todos los 5 corregimientos del distrito de Chitré, en Herrera (Chitré cabecera, La Arena, Monagrillo, Llano Bonito y San Juan Bautista) también están bajo esta medida de emergencia sanitaria.
El futuro de Azuero depende de la rápida restauración de la calidad del agua en sus fuentes naturales y de las acciones inmediatas para mitigar los daños ya ocasionados.