El director de la Caja de Seguro Social (CSS), Dino Mon, anunció durante la rendición de cuentas 2024-2025, que el presupuesto para el próximo año será de $8,122 millones, equivalente al 23% del presupuesto general del Estado. Para cubrir este monto, se utilizarán $286 millones de las reservas institucionales, con el fin de equilibrar los gastos de los programas de enfermedad y maternidad.
Del total presupuestado, $2,325 millones se destinarán a gastos operativos, $3,029 millones al pago de pensiones y prestaciones económicas, $2,462 millones a inversiones financieras, y $305 millones a inversiones físicas. La institución atiende actualmente a 2.8 millones de asegurados, lo que representa un 63% de cobertura poblacional.
“Vamos a recibir $7,835 millones en ingresos estimados, y necesitaremos usar $286 millones de nuestras reservas para cubrir el total de gastos del próximo año”, explicó el director de la CSS. A pesar del crecimiento presupuestario del 11% con respecto a 2025, se prevé una reducción del 3% en los gastos de funcionamiento.
Mon anunció que la entidad “ajustará el cinturón y disminuirá el gasto operativo para cubrir el incremento en pensiones de $175 millones”, y destacó que el presupuesto responde a tres lineamientos estratégicos: sostenibilidad financiera, inversiones inteligentes y equidad territorial.
Con respecto al uso de las reservas, el director general explicó que “forma parte de una estrategia temporal, que disminuirá gradualmente en el tiempo, a medida que el sistema se fortalezca”. Agregó que la Ley 462, de marzo de 2025, que modificó la Ley Orgánica de la institución, ha permitido sanear las finanzas y mejorar la gestión de cobros, reduciendo la mora empresarial de $310 a $277 millones.
Nuevas plataformas digitales
Mon también anunció el lanzamiento de dos nuevas plataformas tecnológicas: Mi Farma Digital y Mi Receta Digital, herramientas diseñadas para optimizar la entrega de medicamentos y reducir los tiempos de espera en farmacias.
Esto responde a las constantes quejas de los asegurados, quienes no consiguen con facilidad los medicamentos en las policlínicas e instalaciones de la CSS. En muchos casos, los pacientes deben realizar varios recorridos para encontrar las medicinas recetadas.

Según Mon, la plataforma Mi Farma Digital permitirá a los asegurados conocer en tiempo real el inventario de medicamentos por provincia y unidad ejecutora, evitando desplazamientos innecesarios. Por su parte, Mi Receta Digital facilitará a los médicos —tanto de la CSS como del sector privado— emitir recetas electrónicas vinculadas al inventario disponible, agilizando la dispensación en las farmacias institucionales.
“Con estas plataformas, el asegurado sabrá exactamente dónde hay medicamentos disponibles y por cuánto tiempo, eliminando el clásico ‘no hay’”, señaló el director, quien añadió que en esta primera etapa coexistirán las recetas manuales y digitales, aunque el objetivo es eliminar completamente las recetas físicas a finales de noviembre, utilizando diciembre como mes de transición.
Actualmente, la institución reporta un 92.4% de abastecimiento general de medicamentos y planea mantener la información actualizada en línea para garantizar transparencia y eficiencia en la gestión de insumos.
Pacientes reconocen avances, pero piden equidad
Por su parte, Emma Pinzón, presidenta de la Federación de Asociaciones de Pacientes con Enfermedades Críticas, Crónicas y Degenerativas, reconoció los avances en la reducción de la mora quirúrgica, aunque advirtió que aún existen atrasos heredados y que será necesario tiempo y trabajo conjunto para lograr una atención plenamente oportuna y equitativa.
“Los números son evidentes de que sí ha habido una mejoría en cuanto al suministro de medicamentos y la disminución de la mora. Es cierto que se han heredado atrasos de muchos años y que esto va a tomar tiempo”, señaló Pinzón. Sin embargo, advirtió que aún hay desafíos en el acceso de los pacientes a los servicios.
“Queremos que las personas conozcan cómo navegar en el sistema, que el acceso a las citas y cirugías sea equitativo, y que ningún panameño necesite usar influencias para obtener atención médica o medicamentos”, subrayó.
Sobre las plataformas digitales, tanto Pinzón como Alexander Pineda, vocero de la Asociación de Pacientes Renales, recomendaron mayor divulgación y accesibilidad.
“Existe ya una plataforma, pero está un poco atrasada. Esta nueva versión ayudará muchísimo al paciente, siempre que se garantice facilidad de uso. Lo ideal sería que sea una aplicación descargable, no solo disponible en la página web, porque muchas personas no tienen acceso constante a internet”, manifestó Pineda.
Los pacientes reiteraron su disposición a colaborar con la administración de la CSS en las mesas de trabajo, con el propósito de garantizar que cada asegurado reciba su cita, cirugía y medicamento de manera pronta, oportuna y con calidad.
Citas médicas: el reto de Mon
Entre los objetivos prioritarios del próximo año están mejorar la calidad de la atención médica, garantizar el abastecimiento de medicamentos, implementar el expediente clínico electrónico y ampliar la telemedicina.

La dirección general reconoció que uno de los principales retos será resolver el problema de las citas médicas.“Es un problema más profundo de lo que parece, con múltiples causas, pero vamos a trabajar con ahínco para resolverlo en 2026”, aseguró Mon.
Actualmente, una de las quejas más constantes de los asegurados son los prolongados tiempos de espera en las diferentes policlínicas. Citas de especialidades como neurología, cardiología y gastroenterología pueden demorar más de nueve meses, e incluso algunos pacientes deben esperar hasta un año por una evaluación médica.