A casi 45 minutos del centro de la isla, el lugar encierra elementos históricos mezclados con importantes comodidades para los turistas que allí se dan cita.
Restaurantes, hoteles y bares son algunos de los comercios alrededor del Nelson Dockyard, principal muelle del lugar, y el cual se ha convertido en uno de los puntos más visitados de la isla. Su nombre proviene del marino inglés Horatio Nelson, quien fue uno de los más importantes comandantes de este muelle. En el mismo, se realizó un trabajo de restauración, por lo que se pueden apreciar componentes de cómo era utilizado el lugar durante la presencia inglesa.
Además, el Puerto Inglés cuenta con un pequeño mercado, en el que los turistas encontrarán diversos suvenires de Antigua y Barbuda.
Justo en la entrada, también hay una garita de policía, por lo que los visitantes se sentirán seguros durante su recorrido por la zona.
El puerto también es utilizado por diversas embarcaciones de vela, una de las principales actividades deportivas en la isla. Durante la Sailing Week, la más importante competencia de esta disciplina, hay cientos de barcos atracados en dicho muelle.