Tres advertencias de ilegalidad fueron presentadas para impedir la adjudicación de tres contratos para el servicio de aseo, limpieza y desinfección de ocho hospitales administrados por el Ministerio de Salud (Minsa), que suman $7.8 millones, por seis meses.
Los tres contratos serían adjudicados a través del mecanismo de cotización en línea (por tanto, no hubo convocatoria a una licitación pública), a favor de dos consorcios: uno liderado por Hombres de Blanco Corp. y otro, por Sicarelle Holdings Inc., quienes ya prestan el servicio.
Las advertencias de ilegalidad fueron presentadas ante el Minsa por Ramsés Paulette Dopeso, representante legal de la empresa Consulting Design Development And Engineering, S.A. Paulette presentó tres advertencias, ya que hubo tres procedimientos excepcionales de cotización en línea para la contratación de este servicio.
La convocatoria se realizó en diciembre de 2024, en vísperas de la finalización del contrato vigente hasta entonces para la limpieza de los mismos hospitales a nivel nacional. Sin embargo, en lugar de convocar a una nueva licitación, el Minsa dividió el objeto de la contratación en tres actos públicos para ajustar la adjudicación del servicio al procedimiento excepcional.
Por ejemplo, en ningún caso el monto a contratar superó los $3 millones. De haber sido así, el Minsa habría tenido que solicitar la aprobación del Consejo de Gabinete.
El 6 de diciembre pasado se recibieron las cotizaciones, a pesar de que la convocatoria se divulgó el día antes, a las 5:49 p.m., lo que seguramente limitó la competencia e impidió que ofertaran otras empresas.
La justificación
El Minsa, para contratar sin licitación, se basó en el numeral 1 del artículo 79 de la Ley de Contrataciones Públicas, que lo justifica cuando “no haya más de un oferente o en aquellos casos en que, según informe técnico fundado, no haya sustituto adecuado”.
Sin embargo, según las advertencias de ilegalidad, “ninguna de estas dos premisas se cumple en el presente caso”.
Estas contrataciones, todas por seis meses, terminaron en manos de dos consorcios, seleccionados por una comisión evaluadora integrada por tres funcionarios del Minsa.
Los elegidos
Dos de estos contratos fueron adjudicados a Salud e Higiene Hospitalaria, que lidera la polémica empresa Hombres de Blanco, Corp., que tuvo serios y múltiples problemas de cumplimiento con su contrato en el Aeropuerto Internacional de Tocumen, S.A. (Aitsa), lo que habría precipitado su salida antes de finalizar su millonario contrato.

El Minsa seleccionó a Salud e Higiene Hospitalaria para la limpieza de los hospitales Nicolás Solano (La Chorrera) y San Miguel Arcángel (San Miguelito) y para el Instituto Mental Matías Hernández (Panamá), por $2.8 millones.

Otro contrato le fue concedido para la misma labor en otros tres hospitales públicos: Anita Moreno, Joaquín Pablo Franco Sayas y Cecilio A. Castillero (todos en Azuero), por $2.6 millones, para un total de $5.4 millones.

Para el tercer contrato, el de menor monto ($2.4 millones), fue seleccionado el consorcio Bioseguridad Hospitalaria, liderado por la también controvertida empresa Sicarelle Holdings, Inc., a quien corresponderá la limpieza de los hospitales Regional de Veraguas Dr. Luis “Chicho” Fábrega (Santiago) y el Integrado Aquilino Tejeira (Penonomé).
‘No se justifica’
En las advertencias de ilegalidad se señala que los servicios contratados, contrario a lo que alega el Minsa, pueden ser prestados por diversas empresas nacionales, de manera que “no se justifica la contratación mediante procedimiento excepcional”, ya que con ello se impidió satisfacer “los mejores intereses del Estado”.
Como se presentaron, al menos, dos oferentes, Paulette alega que el Minsa debió descartar el uso del procedimiento excepcional de contratación.
Burlas a la ley
Pero hay más.
En las advertencias presentadas por Consulting Design Development And Engineering, S.A. se advierte que en estos actos hubo “vicios de ilegalidad”. Específicamente, se menciona la pretensión de violar tres artículos de la Ley de Contrataciones Públicas: los números 48, 56 y 79.
El artículo 48 establece los plazos de publicación de las convocatorias, que varían según el monto a contratar. En el caso del Minsa, el plazo, según la ley, debió haber sido no menor de 15 días –y no uno, como ocurrió–, pues el monto era hasta un máximo de $3 millones.
“Este artículo [el 48] ha sido violado al publicarse la convocatoria de la cotización en línea con menos de un día de antelación, lo cual es a todas luces una maniobra evasiva del plazo mínimo que establece la ley para contratos de esta cuantía”, indican los documentos.
En cuanto al artículo 56, las advertencias señalan que este artículo se pretende violar “al querer aplicarse un procedimiento excepcional de contratación en perjuicio del mandato expreso de este artículo, que [en este caso] ordena la aplicación de los correspondientes procedimientos de selección de contratistas, a saber: contratación menor; licitaciones públicas por mejor valor, por convenio marco, por subasta en reversa y subasta de bienes públicos”.
El artículo 79 de la Ley de Contrataciones Públicas menciona once causales para invocar un procedimiento excepcional de contratación. Según Paulette, ni uno se aplica a lo que pide el Minsa. Tampoco se habrían cumplido sus requisitos: un estudio de mercado y al menos tres propuestas de cotización.
Paulette pidió al Minsa remitir sus advertencias a la Sala Tercera de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia, a fin de que declare la ilegalidad del procedimiento excepcional de contratación utilizado por el Minsa para la limpieza, aseo y desinfección de los ocho hospitales públicos mencionados.
Prestación... ¿sin contrato?
Paralelamente, se solicitó al contralor Anel Flores una “fiscalización de oficio”, ya que las empresas seleccionadas están brindando sus servicios “sin contar con un contrato debidamente perfeccionado, es decir, refrendado por la Contraloría…”

Eso violaría la Ley de Contrataciones Públicas (artículo 60), que indica que cuando el solicitante de una contratación pública inicia la prestación de sus servicios sin el refrendo de la Contraloría, “no se le otorgará la concesión y se le sancionará con multa equivalente al doble del daño causado o al doble del monto que el Estado recibiría en virtud del contrato de concesión…”
Sin permiso sanitario
El permiso sanitario de operación que presentó Hombres de Blanco en diciembre pasado para competir en la limpieza de los hospitales mencionados expiraba solo semanas después: el 31 de enero de 2025.

La renovación de este permiso, según la propia resolución que certificó a Hombres de Blanco, “deberá ser tramitada con sesenta (60) días de antelación a su vencimiento y se otorgará siempre que el establecimiento haya mantenido las condiciones sanitarias que motivaron su expedición inicial”.
Es decir, a estas alturas ya debería tener un nuevo permiso sanitario.
La Prensa se comunicó con el Minsa el pasado 17 de febrero para solicitarle copia del nuevo permiso sanitario, ya que hay informes de que Hombres de Blanco, Corp. ya está prestando los servicios de limpieza, aseo y desinfección de los hospitales mencionados.
Si Hombres de Blanco está prestando servicios desde enero, lo estaría haciendo sin el debido permiso sanitario de operación, pues este permiso venció el 31 de enero pasado, lo que constituiría una falta grave. El Minsa le comunicó ese mismo día, 17 de febrero, a La Prensa que el permiso estaba en trámite, que solo faltaba una firma.
Luego de una promesa de que el documento sería remitido a este medio en cuanto estuviera debidamente firmado, el Minsa no lo ha hecho hasta ahora.